Resumen en español de las "Directrices clínicas de la OMS para el tratamiento del tabaquismo en adultos" preparado por SALT

SALT ha preparado este resumen basado en las directrices de tratamiento clínico para el abandono del tabaco en adultos de la OMS (en inglés, WHO Clinical Treatment Guideline for Tobacco Cessation in Adults), publicadas el 2 de julio de 2024.

Resumen ejecutivo

El tabaquismo, con 8 millones de muertes anuales y una gran carga económica global, afecta a 1.250 millones de personas. Se requieren esfuerzos intensos para combatir esta epidemia y expandir los servicios de abandono del tabaco.

La OMS, mediante su Convenio Marco, reconoce la necesidad crítica de apoyar a los fumadores para dejar el tabaco. Aunque más del 60% desea abandonar el hábito, el 70% carece de acceso a servicios adecuados debido a limitaciones en los sistemas de salud. La falta de directrices nacionales en muchos países subraya la urgencia de una guía clínica estándar de la OMS. El objetivo principal es proporcionar orientación técnica para el abandono del tabaco en adultos, promoviendo intervenciones conductuales y farmacológicas efectivas como parte de una estrategia integral de control del tabaquismo

Directrices elaboradas bajo la metodología OMS, con expertos y revisión de evidencia (20 estudios), usando el método GRADE. Borrador final revisado externamente.

Proveedores de salud (clínicos y comunitarios) y responsables de políticas son el público objetivo para mejorar los servicios de cesación tabáquica.

Directrices clínicas de la OMS para el tratamiento del tabaquismo en adultos
Directrices clínicas de la OMS para el tratamiento del tabaquismo en adultos
Resumen de recomendaciones

Esta guía recomienda apoyo conductual (clínico y comunitario), incluyendo intervenciones digitales y farmacológicas, y políticas para programas de cesación tabáquica. No recomienda terapias tradicionales/alternativas por evidencia insuficiente.

Fuente OMS - Resumen de recomendaciones
Fuente OMS - Resumen de recomendaciones

Fuente: OMS

Apoyo conductual, tanto en entornos clínicos como comunitarios
  1. La OMS recomienda que los proveedores de atención médica brinden sistemáticamente asesoramiento breve (entre 30 segundos y 3 minutos por encuentro) como práctica habitual a todos los consumidores de tabaco que accedan a cualquier centro de atención médica.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada

  2. La OMS recomienda que se ofrezca un apoyo conductual más intensivo a todos los consumidores de tabaco que estén interesados ​​en dejar de fumar. Las opciones de apoyo conductual son el asesoramiento individual presencial, el asesoramiento grupal presencial o el asesoramiento telefónico; se deben ofrecer múltiples opciones de apoyo conductual.

    Recomendación fuerte

    Evidencia alta (asesoramiento individual)

    Evidencia moderada (asesoramiento grupal y asesoramiento telefónico)

Intervenciones digitales para dejar de fumar
  1. Las modalidades digitales para dejar de fumar (mensajes de texto, aplicaciones para teléfonos inteligentes, intervenciones basadas en inteligencia artificial o intervenciones basadas en Internet), de forma individual o combinada, pueden ponerse a disposición de los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar, como complemento a otro apoyo para dejar de fumar o como herramienta de autogestión.

    Recomendación condicionada

    Evidencia moderada (mensajes de texto)

    Evidencia baja (aplicaciones para teléfonos inteligentes/intervenciones basadas en inteligencia artificial)

    Evidencia muy baja (intervenciones basadas en Internet)

La OMS observa un rápido ciclo de innovación en las tecnologías digitales que exige revisiones a medida que surgen nuevas evidencias

Muy baja
Muy baja
Intervenciones farmacológicas realizadas tanto en entornos clínicos como comunitarios
  1. La OMS recomienda vareniclina, terapia de reemplazo de nicotina (TRN), bupropión y citisina como opciones de tratamiento farmacológico para los consumidores de tabaco que fuman y están interesados ​​en dejar de fumar. Se recomiendan vareniclina, TRN o bupropión como opciones de primera línea; la TRN combinada (un parche más una forma de acción corta, como chicle o una pastilla) es una opción para los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar que usarán TRN.

    Recomendación firme

    Evidencia alta (vareniclina, TRN y bupropión)

    Evidencia moderada (TRN combinada, citisina)

  1. Se puede ofrecer bupropión en combinación con TRN o vareniclina a los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar cuando no haya una respuesta adecuada a los tratamientos de primera línea.

    Recomendación condicional

    Evidencia moderada (bupropión más vareniclina)

    Evidencia baja (bupropión más TRN)

Aunque la citisina es tan eficaz como otros medicamentos de primera línea, se incluye en la lista por separado porque la certeza de la evidencia es moderada, actualmente solo está disponible legalmente en algunos países, tiene más variabilidad en el régimen de dosificación y menos revisión y aprobación por parte de los organismos reguladores de medicamentos a nivel nacional. Sin embargo, todos los medicamentos tienen recomendaciones sólidas y se puede utilizar cualquiera de ellos.

Firme
Firme
Alta
Alta
Moderada
Moderada
Condicionada
Condicionada
Moderada
Moderada
Baja
Baja
Intervenciones para dejar de consumir tabaco sin humo
  1. La OMS recomienda proporcionar intervenciones intensivas de apoyo conductual (asesoramiento individual presencial, asesoramiento grupal presencial o asesoramiento telefónico) para los consumidores de tabaco sin humo interesados ​​en dejar de fumar.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada

  1. La OMS recomienda vareniclina o TRN como opciones farmacológicas para los consumidores de tabaco sin humo interesados ​​en dejar de fumar.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada (vareniclina)

    Evidencia baja (TRN)

Firme
Firme
Fuerte
Fuerte
Combinación de tratamientos conductuales y farmacológicos
  1. La OMS recomienda combinar la farmacoterapia con intervenciones conductuales para apoyar a los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar.

    Recomendación firme

    Evidencia alta

Fuerte
Fuerte
Terapias tradicionales, complementarias y alternativas
  1. No hay suficientes pruebas para hacer una recomendación a favor o en contra de las terapias tradicionales, complementarias y alternativas para los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar. Si los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar utilizan estas terapias, asegúrese de que se les ofrezca un enfoque integral para apoyar el abandono del tabaco, incluido apoyo conductual y/o farmacoterapia.

Intervenciones y políticas a nivel de sistema
  1. La OMS recomienda que todos los establecimientos de salud incluyan en sus registros médicos (incluidos los registros médicos electrónicos) el estado de consumo de tabaco y el uso de intervenciones para dejar de fumar, a fin de facilitar la interacción de los proveedores con los pacientes fumadores y aumentar la adopción y el mantenimiento de intervenciones de tratamiento basadas en evidencia.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada

  2. La OMS recomienda que se capacite a todos los proveedores de atención de salud sobre la prestación de intervenciones para dejar de fumar basadas en evidencia, con estímulo y retroalimentación constantes, en sus prácticas médicas habituales en todos los niveles de los entornos de atención de salud.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada.

  3. La OMS recomienda que se proporcionen intervenciones para dejar de fumar basadas en evidencia sin costo o a un costo reducido a todos los consumidores de tabaco interesados ​​en dejar de fumar. Se prefiere firmemente la opción sin costo a la opción de costo reducido.

    Recomendación fuerte

    Evidencia moderada

Fuerte
Fuerte
Moderada
Moderada
Fuerte
Fuerte
Moderada
Moderada
Fuerte
Fuerte
Moderada
Moderada
Certeza de la evidencia: Definición
  • Alta | Es muy poco probable que investigaciones adicionales cambien nuestra confianza en la estimación del efecto.

  • Moderada | Es probable que investigaciones adicionales tengan un impacto importante en nuestra confianza sobre el efecto y puedan cambiar la estimación.

  • Baja | Es muy probable que investigaciones adicionales tengan un impacto importante en nuestra confianza en la estimación del efecto y probablemente cambien la estimación.

  • Muy baja | Cualquier estimación del efecto es muy incierto.

Introducción

Magnitud del problema: El tabaquismo representa una de las mayores amenazas para la salud pública a nivel mundial. 1.250 millones de personas son consumidoras de tabaco, con un 80% residiendo en países de bajos y medianos ingresos. El tabaquismo causa más de 8 millones de muertes anuales.

Impacto económico: El costo económico global del tabaquismo en 2012 fue estimado en 1.436 billones de dólares americanos, equivalente al 1.8% del PIB mundial. Países de ingresos bajos y medios soportan aproximadamente el 40% de este costo.

Respuestas y soluciones: El Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco (CMCT de la OMS) propone una serie de recomendaciones para reducir el daño del tabaco, incluyendo la regulación de la industria tabacalera. Las políticas recomendadas abarcan la eliminación del humo de tabaco ajeno, la reducción de la publicidad del tabaco, el aumento de precios a través de impuestos, campañas en medios de comunicación y la regulación de productos. Además, el artículo 14 del CMCT de la OMS propone ayudar a los consumidores a abandonar el tabaco. Finalmente, las directrices del artículo 14 enfatizan que es importante implementar medidas de tratamiento de la dependencia del tabaco de manera sinérgica con otras medidas de control del tabaco.

Desafíos en el abandono del tabaquismo: Más del 60% de los fumadores adultos desean dejar de fumar, pero el 70% no tiene acceso a servicios integrales de apoyo. Los sistemas de salud enfrentan limitaciones de recursos y capacidad para proporcionar servicios de abandono del tabaco. Además, la dependencia a la nicotina es una enfermedad crónica que a menudo requiere múltiples intentos para dejar de fumar. Finalmente, el 60% de los estados miembros de la OMS no tienen directrices nacionales de tratamiento clínico para apoyar el abandono del tabaco.

En resumen, el tabaquismo es un grave problema de salud pública con importantes repercusiones económicas, y aunque existen soluciones propuestas por la OMS, la falta de acceso a servicios de apoyo para dejar de fumar representa un desafío significativo, especialmente en países de ingresos bajos y medios.

Directrices existentes de la OMS

La OMS considera el abandono del tabaco un componente esencial en el abordaje de diversas condiciones de salud, proporcionando directrices y recomendaciones específicas para diferentes poblaciones y contextos de atención, tal como se establece en diversas directrices de la OMS:

  • Las recomendaciones de la OMS para el embarazo, que ofrecen guías basadas en evidencia para identificar, manejar y prevenir el consumo de tabaco y la exposición al humo ajeno en mujeres embarazadas, incluyendo consejos para sus familiares.

  • Las pautas para el manejo de la salud física en adultos con trastornos mentales graves, que recomiendan considerar intervenciones conductuales, farmacológicas (vareniclina, bupropión, TRN) y combinadas para ayudarles a dejar de fumar.

  • El paquete de intervenciones esenciales de la OMS (PEN) para enfermedades no transmisibles (ENT) en la atención primaria, que incluye un protocolo de asesoramiento para dejar de fumar (las 5 A) como una intervención fundamental para abordar las ENT.

Fundamento y objetivos

Esta directriz incluye recomendaciones sobre apoyo conductual, incluidas intervenciones digitales para dejar de fumar; intervenciones farmacológicas; y las intervenciones y políticas a nivel de sistema que mejoran la adopción e implementación de intervenciones para dejar de fumar. No se hacen recomendaciones sobre terapias tradicionales, complementarias y alternativas para dejar de fumar debido a la evidencia insuficiente. Esta directriz no proporciona recomendaciones sobre políticas e iniciativas a nivel de población que puedan promover el abandono del tabaco, como aumentar los impuestos al tabaco, implementar entornos libres de humo, campañas masivas en los medios de comunicación contra el tabaco o la aplicación de advertencias sanitarias gráficas. Sin embargo, la importancia crítica de estas políticas e iniciativas, y su papel como complemento del apoyo individual y clínico para las personas que intentan dejar de fumar, se reconocen en esta guía y se analizan como consideraciones clave para la implementación.

Público objetivo

Esta guía ofrece recomendaciones a profesionales sanitarios y a responsables políticos/gestores sobre cómo mejorar los servicios para dejar de fumar, destacando la importancia de adaptar las intervenciones a las condiciones locales.

Métodos

Esta directriz de la OMS para dejar de fumar se elaboró siguiendo un proceso riguroso que incluyó la supervisión de un Comité de Revisión de Directrices, la creación de un Grupo Directivo (GD) y un Grupo de Elaboración de Directrices (GDG) con representación diversa de expertos. Se contó con la participación de un metodólogo externo GRADE y un Grupo de Revisión Externa (ERG) que revisó las directrices preliminares. El alcance de la directriz se definió a través de la revisión de directrices existentes y las necesidades de la población, y el GDG acordó preguntas clave utilizando el marco PICO, abordando siete categorías de intervención: apoyo conductual, intervenciones digitales, intervenciones farmacológicas, intervenciones para dejar de consumir tabaco sin humo, combinación de tratamientos, terapias tradicionales/complementarias/alternativas e intervenciones/políticas a nivel de sistema. El resultado crítico para todas las intervenciones fue la tasa de abandono a largo plazo (abstinencia a los 6 meses o más). Para las intervenciones a nivel de sistema, también se consideraron críticos varios resultados de proceso. Las tasas de abandono a corto plazo se consideraron resultados importantes para ciertas intervenciones, al igual que los daños y eventos adversos para las intervenciones farmacológicas y terapias alternativas.

Presentaciones en PPTX de las directrices